viernes, 1 de abril de 2016

Por la emanipación de los trabajadores. Preparar un Primero de Mayo sin política y sin violencia


Por Jaime Yovanovic Prieto

Cuarto Stato
El Primero de Mayo es considerado el Día Internacional de los Trabajadores, pero se lo han apropiado los partidos y corrientes ideológicas, de modo tal que se ha transformado en un día “de las izquierdas”, lo que de inicio introduce la división y la disputa interna entre los propios trabajadores, algunos de los cuales van a marchar para celebrar “su día” en medio de un torbellino de carteles, consignas y banderas diversas junto al reparto de boletines, diarios y folletos de todas las corrientes habidas y por haber, que aprovechan la ocasión para hacer proselitismo y disputar adeptos.

Los trabajadores filiados a corrientes de derecha, centro y etc. no van, ya que los van a agarrar a puñetazos, por más que los protejan los pacos de rojo, lo que quiere decir que sólo los izquierdistas son trabajadores de verdad y el resto vendidos a la patronal, borrando de un plumazo las negociaciones del PC contrarias a los intereses de los profesores, que en Valparaíso, por poner un pequeño ejemplo, fueron engatuzados por los miembros y allegados de una familia que levantó una corriente “alternativa” que no era tal, al igual que años atrás habían formado la Fuerza Social salida del PC, pero conservando una gran cantidad de puentes. Notorios fueron esos esfuerzos “alternativos” en la distribución de folletos e instalación de stands en la Plaza Victoria en los días en que a nivel nacional los profesores tomaban distancia de la dirigencia partidaria y hasta le lanzaron un mangazo al presidente del gremio.

Otros estructuras más autónomas formaron centrales, corrientes y agrupaciones sindicalistas que luego, muy luego, al buscar la “unidad” por fuera de la máquina de la CUT, algunas cayeron en manos de la UCT, Unión Clasista de Trabajadores, que reune al más fiero estalinismo y enemigos de la autonomía comunitaria, o sea que sus principales enemigos no son los patrones, sino los trabajadores que desean trabajar en común sin los partidos encima que se les enroscan como camisas de fuerza para controlar y dirigir sus movimientos al mismo tiempo que gritan por la emanciáción, como el jinete encima del caballo o como la mosca que dice “vamos arando” al buey.
Trabajadores portuarios. Valparaíso 1903
Que los partidos se aprovechan de la gente, eso ya lo sabe todo el mundo, así como que la izquierda y la derecha disputan la torta de la cúspide social pisoteando al resto. Pero hay una masa que todavía agarra papa y sigue creyendo en el viejo pascuero, ya que les han metido la que llaman “conciencia” hasta el hueso, como los religiosos que meten el rosario y los ave María una y otra vez hasta que el sujeto o la sujeta crean que eso que le han metido es “tener fe”,que ha venido del más allá, escondiendo las cartas marcadas del “más acá”. Así hoy día ser de izquierda o ser de derecha es igual que una religión, donde cada uno cree lo que le dice la jerarquía y vaya a ver uno como disputan espacios y se hacen la cama los católicos con los evangélicos, mientras los mormones y los musulmanes van despacito por las piedras. También las iglesias tienen sus fracciones extremistas, como el Opus Dei entre los católicos o los fundamentalistas dentro de los musulmanes, o los grupos del Ku kluk Klan y el Tea Party donde participan oleadas de mormones.

Así las derechas tienen sus ritos, cultos y cultores de todos los pelajes, como las izquierdas tienen los suyos, los centristas los suyos y etc. Cada lado del patíbulo, digo del pandemonio de la política, el izquierdo y el derecho, se odian a muerte y cada fracción interna de cada uno, por su vez se odia también, y es así como la política es una pirámide, en la cima los peces gordos unidos, debajo, como un excremento saliendo del cuerpo, tienen al lado derecho a unos jefes menores y al lado izquierdo a otros jefes menores, que hay que andar sujetando con correas negras los unos y correas rojas los otros y que se muerden o tirotean unos a los otros por ocupar los cargos importantes del poder, mientras los del centro se hacen los cuchos y clavan el puñal por la espalda. Debajo, bajando y ampliándose la pirámide, cada uno tiene sus ramas donde cada una tiene las suyas y asi se multiplican y se clavan en la base de la pirámide, donde está aplastada la población.

Esa pirámide política del poder es idéntica a la pirámide económica del mundo del trabajo, donde las reviravueltas que hay que dar para conseguir dinero con el cual alimentar el consumo por donde se va el dinero de vuelta a los que tienen la sartén por el mango, está por su vez lleno de apóstoles, líderes, vanguardias, jefes y subordinados de la política que se hacen los indispensables para que los pongan a ellos desde los pequeños hasta los más elevados puesto en la pirámide del poder, desde el minúsculo sindicato donde se agarran los troskistas con los estalinistas, ellos dos contra los demócratas cristianos, luego esos tres contra los renovación nacional, y así van, hasta el parlamento y la presidencia de la república.

Así la pirámide de la política se retroalimenta con la pirámide de la economía, y los trabajadores que creen que luchan por un salario, no hacen más que seguir la música del juego de los partidos en pugna, ya que no consiguen lo que pedían pero al menos les dan alguna migaja y se dejan de mosquear, como los pingüinos del 2006 donde los partidos se sentaron en las mesas de negociación para desinflar el movimiento. 

 
Clotario Blest
Para salir de la maraña de las pirámides de la política y de la economía, hay que romper las cadenas de los partidos y las ideologías, pero no con violencia, ya que estamos allí atrapados sin que nadie nos obligue. Hay que partir desde la mirada al otro, al vecino, no a través de los cristales empañados de la política y la economía, sino directamente hasta que nos zafemos de los lentes que tenemos puestos. Mirar, simplemente mirar, y mirando vamos a ver la presencia del otro esquivando nuestra mirada, ya que la tiene prisionera voluntariamente en las redes de la maraña. ¿Se entiende que nos sienten en las escuelas mirando la nuca del que está delante?

Una vez que usted pueda mirar limpiamente, que todo su cuerpo lo está pidiendo, podrá descubrir lo poco importante que es el que su vecino o compañero de trabajo sea o haya sido momio o rojo y podrá ver y descubrir otras facetas que antes le estaban ocultas. No sólo vea el daño que hace alguien, sino el daño que le han hecho a ese alguien. Tarde o temprano ese vecino conenzará a mirarlo a usted de la misma manera, no se apure, tiene toda la vida por delante. Eso se llama compasión, que no es lo mismo que el paternalismo autoritario del que da limosna “porque tiene” o “ayuda” a los pobres, sino como una enfermera que sufre el dolor del otro y muere por mitigarlo. Eso en el fondo es el amor. Pero usted nada va a lograr intentando ser “compasivo” individualmente, ya que el amor es flujo y circulación de energías que no acaban ni se detienen en uno mismo ni con una sola persona, al contrario, debe ir más allá, pero no hacia el infinito o hacia la abstracción, sino a conseguir que ese flujo de amor circule entre los vecinos y desde y hacia la madre tierra, así construimos o reconstruimos el común.

Así la separación de la familia con el trabajo es una aberración, una reproducción constante de las distancias y separaciones de las miradas y flujos afectivos, de allí la importancia de la autogestión comunitaria de la producción de alimentos, medicinas, servicios, energía, educación, arte, cultura y salud, donde la emancipación de los trabajadores sea al mismo tiempo la emancipación del encierro de las familias en sus casas y la apertura hacia la gran familia del barrio.

No se trata de destruir el dinero, la política y el trabajo sino de reconstruir el mundo de la vida desde nuestro hábitat inmediato.

Para quienes, agrupaciones o personas, deseen participar en el diseño y programación de forma y contenido de un Primero de Mayo sin partidos y sin violencia, a ser realizado el domingo 01 de mayo con familias y niñ@s, les pedimos que se comuniquen con nosotros en el correo unlibre@gmail.com 
 

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